9 de Marzo 2005

Ángel

away wwwwelderstudioscom.jpg

"Dios es con los artistas como el pajarero con los pájaros: les saca los ojos para que canten mejor" Arthur Rimbaud

Cuando mi primo tenía unos 16 o 17 años, llevaba el pelo un poco más largo de lo normal. Empezaba a quedarse calvo, y el pelo le caía lacio por las dos vertientes que nacían de su raya en medio. Como por aquel entonces estaba entusiasmado con Lorca, todo el mundo creía que imitaba su peinado, y, por más que lo negara por activa y por pasiva, jamás logró sacar a nadie esa idea de la cabeza.

Escribía poemas de tinte lorquiano, buscando el sonido y pasando un poco del contenido real. Hubo uno que copié porque me gustó particularmente. Claro, que por aquel entonces yo escribía páginas inspiradas en el Bécquer más superficial, relatando las múltiples desgracias de mi vida, así que cualquiera se fía de mi gusto. Si no fuera una cínica no reconocería sólo que por aquel entonces era una niña bastante gilipollas, sino que también procuraría acordarme de vez en cuando de que me sentía realmente sola, y realmente hundida. Y reconocería también que a mi primo no se le daba nada mal dibujar notas con las letras, y le daría el coñazo hasta arrancarle más poemas.

Mis primos no tuvieron una infancia fácil. Bueno, ni una adolescencia. Y parece ser que tampoco una juventud. Entrar en detalles sería tedioso, doloroso e inútil, porque yo no era más que una niña que apenas veía nada, sólo el martirio de mi primo. Y no fue hasta mucho después cuando fui capaz de dejar de mirar a mi ombligo y me di cuenta de que si mi prima aparentaba no enterarse de nada era por defenderse. Describir a mi tio sería también casi imposible, quizá porque prefiero no plantearme muchas cosas. Los tres sentíamos/sentimos una adoración ciega por él, siempre nos ha fascinado. Por su sentido del humor, por su cultura, por miles de cosas. Pero al mismo tiempo temblábamos cuando se enfadaba. Y eso ocurría a menudo, la mayoría de las veces sin razón alguna. Al perder ese miedo reverencial he perdido un poco de aquella fascinación. O quizá es sólo que me he vuelto de yeso y he perdido la capacidad de sentir intensamente.

La infelicidad de mis primos era un tema bastante habitual por aquella época, en la que estábamos muy muy cercanos. No me refiero a que fuera la comidilla general, en realidad solía hablarse de ello con el mismo Ángel (mi primo, vaya) y se llegaba siempre a la misma conclusión "¡Tú lo que tienes que hacer es mandar a tus padres a la mierda!" "¡Bah!¡Tú, ni caso!". Han pasado cosa de siete años desde entonces, y por primera vez está realmente en disposición de empezar a hacerlo. Es mucho tiempo.

Hubo un día en que estaban hablando de ello él y otra prima nuestra, Paloma. No es una prima cualquiera, he tenido con ella siempre casi tanto trato como con mis hermanas, así que, evidentemente, cuenta como una más. Mi madre se mete con ella y conmigo porque dice que somos iguales, a pesar de que me saque quince años.

Aquel día, después de volver a darle vueltas a lo mismo y de repetir las mismas frases, ya casi tópicas, sucedió algo distinto, se rompió el bucle al que había sido condenado aquel tema. A Ángel, algo ensimismado e inocente, se le ocurrió añadir algo más, algo tan pintoresco como su poesía. Cuando la conversación parecía agotada, le oí decir:

- Hombre, lo bueno que tiene lo de sufrir es...

Paloma saltó como un rayo:

- Sí, ¿el qué? ¿que maduras antes? ¿y para qué sirve madurar antes?

Ángel, con el asombro marcando su cara ante una respuesta tan rápida e intempestiva, que había chocado frontalmente con sus tranquilas meditaciones, respondió algo titubeante:

- ¡No! ¡No, hombre...! Lo que digo, es que lo de sufrir me viene bien para escribir poesía!

- ¡Mira, Ángel, no me jodas!- contestó mi prima estallando en carcajadas, mientras que Ángel, asombrado nuevamente por la escasa aceptación de aquella idea que él encontraba tan clara, comenzaba una perorata exponiendo el sufrimiento necesitado por los poetas para crear, y el sufrimiento de García Lorca en particular.

Probablemente Rimbaud tenía también diecisiete años cuando escribió lo de ahí arriba.

Mi amigo Taboso también piensa que cuando uno es feliz no escribe, o le sale fatal. También opina que a mí lo que me pasa es que me gusta estar deprimida, y que, si no tengo por lo que estarlo, me lo busco. Piensa que si no, no estoy en mi salsa, pero creo que es el único que piensa así.

Oscar Wilde decía que la única forma de acabar con la tentación es caer en ella. Pero muchas veces eso no es suficiente para acabar con el "mono".

Hoy he recordado tres de las formas con las que calmaba mis nervios antes de anestesiar mi cerebro con miedos y mentiras propias: fumar, beber y escribir. Y me he planteado por primera vez que quizá es la razón por la que ya casi no bebía o escribía, ausencia de nervios y falta de interés por evolucionar un poco. Aunque quizá sea más cierto lo que dice Tabo y es simplemente que era feliz, y que si escribo es retomando el camino de buscar otra felicidad, aquella que un día supe que debía encontrar en mí misma.

Quién sabe, lo mismo con un poco (je) de suerte, acabo siendo una Rimbaud algo crecidita y todo...

______________________________________________________________

Sé que la foto no tiene nada que ver con el texto, pero llevaba mucho tiempo queriendo ponerla. Está cogida de la url que aparece cdo pones el cursor encima. Tiene otras fotos muy bonitas...

La pereza ha vuelto a embargarme, así que en otro momento pondré el poema de mi primo.

Escrito por RedLabel a las 9 de Marzo 2005 a las 12:25 AM
Comentarios

Yo también opino que la tristeza nos hace tener más inspiraciones. La razón es muy sencilla: anhelamos más cosas; la melancolía nos invade.
Prefiero ser feliz a creativa, jeje.

Escrito por anifiga a las 9 de Marzo 2005 a las 03:53 PM

yo tambien prefiero ser feliz porq no creo q nunca me gane la vida escrbiendo.

Escrito por rutty a las 11 de Marzo 2005 a las 05:53 PM

A grandes artistas se les reconoció por su creatividad en estado bien de embriaguez, tristeza, moribundos...

A mi siempre me ha gustado escribir y es cierto q en esos momentos que señalas, es cuando la inspiración deja que sean los sentimientos y no la razón quien exprima la necesidad de comunicar, de experimentar las palabras que recrean el ayer o sueñan el mañana.

Escrito por khardaia a las 14 de Marzo 2005 a las 03:47 PM

estoy totalmente de acuerdo con paloma: de qué cojones sirve madurar antes? últimamente te lo digo a menudo: a veces me gustaría tener esas inseguridades, esas dudas, ser emocionalmente inestable...quizás yo fui de las que tuvo que madurar pronto.

yo creo que a mí ni la tristeza me da creatividad...de todas formas, no creo que haya que estar mal para poder escribir algo bueno. la escritura es un medio para sacar todo lo que tenemos dentro, ya sea bueno o malo. y la felicidad es un estado tan propicio para escribir como el desconsuelo. no sé, quizás es mi propia manera de ver el mundo...ser desgraciado y recrearte tanto en la desgracia me parece contraproducente. sin embargo, también es verdad que, cuando estás mal, puedes canalizarlo por la pluma. we, de todas formas, no me hagas mucho caso, hoy no hago nada a derechas, así que tampoco espero escribir dos frases seguidas con sentido...besitos

Escrito por beaweah a las 18 de Marzo 2005 a las 04:16 AM

anifiga: yo creo que lo que pasa es que cuando estamos mal es cuando más necesidad tenemos de compartirlo. O quizá que, al fin y al cabo, cuando estamos bien siempre es porque tenemos alguien con quien compartirlo, no lo sé...

rutty: je, sabia decisión :P A veces me he planteado que no soy capaz de ser yo misma sin estar triste por algo, y tengo un amigo convencido de ello. Espero que sólo sea una de mis ralladas, porque de ser cierto es una gilipollez como un piano tirar así la vida.

khardaia: sip, es mucho más fácil escribir cuando estás mal, o cuando vas borracha, simplemente porque te desinhibes y no hay miedo a escribir lo que sientes. Que parece una gilipollez, pero a mí cada vez me cuesta más hacerlo.

weah: madurar pronto es una putada de las gordas, cierto. Pero también se sufre viendo que no eres capaz de madurar, y que eres irresponsable, etc. No sé. Por otro lado, ¡vete a otra a contarle que no eres creativa! (y sí, en nombre de tus fans, ¡queremos el capítulo 13!! :P) Y por último, efectivamente, no es necesario estar triste para escribir algo bueno, pero es más fácil que te salga algo bueno escribiendo algo triste, xq es más fácil eso, comunicarlo, es el sentimiento más universal... Hala, ya me he liado xD

Gracias x los comments, que cuando una no tiene ni una puñetera visita hacen mucha ilu xD

Escrito por RedLabel a las 19 de Marzo 2005 a las 05:09 PM
Escribir un comentario









¿Recordar informacion personal?