Pues sí. Aunque se sepa la verdad, aunque sea todo evidente, duele un huevo encontrarte con que la rendija que quedaba abierta se ha cerrado de un portazo.
Intento por todos los medios no buscar pistas para no encontrarme con que no queda ninguna, pero a veces no puedo evitar la tentación. Técnicamente, no cambia nada.
Pero estoy jodidamente triste.
Escrito por RedLabel a las 4 de Noviembre 2007 a las 03:25 PMEs para estar triste.... pero el menor tiempo posible.
Depsués, se abren otras rendijas en puertas de atrás. Y te asomas. Y husmeas. Y encuentras pistas sin buscarlas. Y acabas otra vez triste. O más feliz que un regaliz... xD
Mua